El pasado miércoles 15 de mayo tuvo lugar en el Parque Tecnológico de la ciudad de Pando, Uruguay, una reunión internacional del proyecto BIOMETRANS, coordinado por CARTIF, sobre la producción de biometano como combustible de transporte a partir de biomasa lignocelulósica residual. Los investigadores del centro tecnológico vallisoletano Dolores Hidalgo y Gregorio Antolín fueron partícipes de un workshop que tenía como objetivo contribuir al mejor aprovechamiento del biogás generado por residuos urbanos y agroindustriales.
El proyecto BIOMETRANS pretende fomentar la valorización de los residuos de biomasa seca y húmeda que se generan en la región iberoamericana mediante la producción del mencionado biometano y fomentar su empleo como biocombustible de transporte. Esta iniciativa, que está liderada por CARTIF, está desarrollando procesos innovadores que permitirán organizar la logística del acopio de biomasa y la adecuación de la misma para su tratamiento por digestión anaerobia.
En este sentido, se investigan diferentes tecnologías de pretratamiento de la biomasa para fomentar su biodegradabilidad, se compara la evolución del proceso de digestión anaerobia en una y dos fases, y se investigan diferentes tecnologías de refinado del biogás. Se está diseñando, además, un modelo de comercialización del biometano en la región, evaluando su potencial impacto ambiental, social y económico, y tratando de encontrar la manera de utilizar exclusivamente biocarburantes en los vehículos de transporte (mezcla de biometano y biodiesel).
BIOMETRANS persigue un proceso optimizado de forma integral (incluyendo la etapa de acopio de materia prima, su procesado y comercialización de productos), adaptado a las condiciones de los países participantes y fácilmente transferible, que permitirá fomentar el uso de biocombustibles en la región.
Equipos de investigación de España, Perú, México, Uruguay, Colombia y Guatemala trabajan juntos en este proyecto, que tiene una duración prevista de tres años.