El consorcio del proyecto WalNUT se ha reunido los días 27 y 28 de septiembre en las instalaciones del centro tecnológico CARTIF para desarrollar su reunión periódica M24. Durante el encuentro, los socios han tenido la oportunidad de reunirse presencialmente por primera vez para seguir tratando cuestiones relativas a la recuperación de nutrientes.
El objetivo de esta reunión ha sido poner en común el estado de las actividades desarrolladas a lo largo de sus dos años de actividad y asentar los pasos a seguir durante los siguientes meses. Representantes de la Universidad Politécnica Nacional de Atenas (NTUA), Universidad de Gante (UGENT), CARTIF o Veolia, entre otros, han expuesto la evolución de sus paquetes de trabajo durante los dos días que ha durado la reunión.
El equipo investigador de CARTIF fue el encargado de abrir el encuentro tratando lo relativo al paquete de trabajo WP9 para hablar sobre la coordinación y los aspectos administrativos. Además, expuso el estado del WP3 sobre la demostración y validación del piloto a escala pertinente. Para dotar de valor añadido el encuentro, el consorcio realizó una visita por el centro al finalizar la jornada donde pudo conocer las actividades en las que está inmerso CARTIF, además del propio proyecto.
El papel del proyecto WalNUT es abordar las actuales lagunas en los ciclos de nutrientes de los diversos sistemas europeos de tratamiento de aguas residuales y los problemas medioambientales que conllevan. Para conseguirlo, pretende investigar en la aplicación de sistemas integrales e innovadores de recuperación gracias a la interrelación de tres vectores fundamentales: la industria de tratamiento de aguas residuales, la producción de cultivos y el desarrollo de bioproductos eficientes.
Lo que se persigue a través de esta propuesta es la posibilidad de reincorporar materiales valiosos que actualmente se disipan del modelo económico de la Unión Europea, aplicar modelos de tratamiento de aguas residuales más sostenibles para proteger el medio ambiente, además de definir un sistema alimentario que promueva la seguridad alimentaria. Gracias a estos pasos se pretende conseguir impulsar y desarrollar políticas a todos los niveles para el uso y comercialización de fertilizantes, y promover nuevos modelos económicos de la UE para garantizar el desarrollo de biofertilizantes competitivos.